Caren Tepp: “La democracia en la Argentina está bloqueada y es peligrosa la salida autoritaria que representa Javier Milei”

¡Comparte!

Luciana Pécker

Periodista y activista feminista argentina


El triunfo de Javier Milei (La Libertad Avanza) en las elecciones en Argentina consolida a la ultra derecha -empujada por una alianza financiera, misógina y racista internacional encabezada por Vox- de raíces machistas y con un efecto de reacción y castigo al avance de las mujeres, la libertad sexual y las denuncias de la violencia de género. 

El impacto de una gestión de ultraderecha en un país de vanguardia en legislación feminista y diversa, con una trayectoria en protección estatal y participación sindical va a impactar fuera y dentro de la geografía del país del sur. Sin que se vuelva a entender el mundo como un domino -y no como piezas sueltas- y sin poder enfrentar con mayor fortaleza a una organización ultra liberal trasnacional los efectos van a ser más devastadores.  

En ese escenario, una de las pocas ventanas de esperanza política, fue el resultado positivo de Ciudad Futura en Rosario -en donde el candidato Juan Monteverde perdió por solo 3 puntos la intendencia de la ciudad- con un armado llamativo para la realidad argentina: local, productivo, concreto, sin esconder la identidad feminista y popular pero también con una escucha activa a las necesidades de la población.

La política de Ciudad Futura no se queda en la política. Por eso es el futuro. No se queda en lo discursivo, sino que también produce, a través de la gestión cooperativa, en el tambo “La resistencia”, un emprendimiento que elabora, entre otras cosas, queso y un alimento clásico argentino, delicioso y emblemático: el dulce de leche. “Tan Violentamente dulce” es el nombre que mixtura poesía, literalidad golosa y nutrición afectiva.

Caren Tepp es concejala de Rosario y militante de Ciudad Futura. Ella nació en Santo Tomé, el 26 de noviembre de 1986. Se fue a vivir a la ciudad de Rosario, en la provincia de Santa Fe, para estudiar Ciencias Políticas. Junto con un grupo de jóvenes formó la organización social “Giros”. Levantó un barrio popular – Nuevo Alberdi- en el que durmió durante dos años para evitar que los desalojaran. Otro signo de la diferencia: poner el cuerpo, en vez de decir que se pone, apostar a un territorio, en vez de querer abarcar más de lo que se puede caminar, conocer y reconocer.

En el 2017 encabezó la lista “El poder de las mujeres” que fue la primera fuerza de la historia argentina integrada 100% por mujeres. En 2023 fue reelecta como concejala de Rosario.  Peleó palmo a palmo la campaña electoral en su ciudad junto con su compañero de vida Juan Monteverde y fue una de las pocas candidatas que no se despegó de las consignas feministas a pesar del avance de la ultra derecha y la demonización del machismo de los sectores progresistas y populares al avance de las mujeres y el colectivo LGTTBQ,

¿Cómo evalúas el triunfo de Javier Milei como presidente en Argentina?

La verdad que todavía se hace difícil evaluar el triunfo de Milei y asumirlo. Nos despierta muchos temores lo que puede llegar y venir. Este triunfo significa un golpe. Pero, más allá del resultado de las elecciones, ya se había roto un acuerdo de la convivencia democrática a 40 años del regreso de la democracia (el 10 de diciembre, el día de los derechos humanos, cuando asume Milei, se cumplen 40 años de la asunción de Raúl Alfonsín, el primer presidente democrático después de la dictadura militar que duro de 1976 a 1983). Pero está claro que la democracia está bloqueada. Y con eso podían pasar dos opciones: desbloquearla por abajo, con mayor participación popular y ampliación de derechos o, por el contrario, que surjan proyectos autoritarios como ya pasaba en la región y en el mundo. Lamentablemente que la salida sea autoritaria genera escenarios realmente peligrosos para el futuro inmediato. 

¿Cuáles son las conclusiones a partir de este resultado?

No podemos seguir pensando de la misma manera. Hay una forma de hacer política que está agotada. La política a nivel nacional viene construyendo en la real politik y en el Estado que en la sociedad. Por eso, el neoliberalismo avanza. Ellos supieron promover el individualismo y el salvese quien pueda. Cuando tengan el poder del Estado el neoliberalismo se agudiza. Milei no solo impone el individualismo sino que anunció que va a recurrir a la violencia para imponer sus ideas. 

¿Cómo se piensa la crisis de la democracia si no se permite elegir a un gobierno electo en Guatemala, no hay elecciones ni respeto al voto en Perú y en Argentina se impone en las urnas una opción autoritaria y que ni siquiera apoya el sistema democrático?

En el mundo la democracia se ha vuelto un obstáculo para el neoliberalismo. La propuesta de Javier Milei supo conectar con las frustraciones, los enojos y los odios de la sociedad y generar esperanza en una parte de la sociedad. Hay que tomar nota desde el campo popular y los progresismos porque se le pide a la gente que defienda el presente y no se la invita a construir un futuro más deseable.

¿Cuál es el problema de defender el presente y no el futuro?

Este es un presente de mierda para gran parte de la sociedad y si no empatizamos con los dolores de nuestro pueblo el riesgo que otros vengan con proyectos agresivos para generarle la falsa ilusión que las políticas que generen más miserias los van a sacar adelante. 

¿Cuál va a ser el impacto del gobierno de La Libertad Avanza?

Esto va a traer mayores niveles de desigualdad, exclusión y violencia. 

¿Qué va a pasar con las mujeres y la diversidad sexual con el gobierno de una fuerza que anunció que va a sacar el Ministerio de las Mujeres y Diversidad, que niega la existencia de la brecha salarial de género y del femicidio y que toma a los feminismos como enemigo político?

Este proyecto va a agudizar la feminización de la pobreza y cercenar la autonomía de las mujeres y las diversidades sexuales. Se van a deteriorar las condiciones de vida. Pero, además, para el proyecto de los libertarios es fundamental responsabilizarnos de los problemas que vive la sociedad. Hay una intención que nuestros cuerpos sean los blancos principales de los mensajes de odio. El gran riesgo del gobierno de Javier Milei es el empoderamiento de las fuerzas represivas del Estado y, como lo hemos visto en Brasil, en el gobierno de Jair Bolsonario, una horizontalización de la violencia en términos sociales. Este es un elemento nuevo en la política argentina que se viene imponiendo. 

¿Cuál fue el impacto del intento de femicidio a la ex Presidenta y Vicepresidenta Cristina Kirchner?

El intento de magnicidio a la Vicepresidenta se relaciona con las expresiones de violencia política a las mujeres. Pero si quien toma el poder habilita el odio las consecuencias pueden llegar a ser muy graves. 

¿Cuál es el aprendizaje de la resistencia de las mujeres, especialmente negras, en Brasil al gobierno de Jair Bolsonaro?

Las mujeres brasileñas nos han enseñado en todo este tiempo la gravedad de las consecuencias del bolsonarismo. Ellas dicen que si bien ganó Lula y se venció al bolsonarismo en las urnas no se venció al bolsonarismo en la sociedad. Eso implica una consecuencia irreversible y difícil de desentramar en Argentina. El desafío es cómo cuidar la vida frente a proyectos que se imponen con este nivel de gravedad y que nos eligen a nosotras como el principal enemigo de sus proyectos autoritarios.

¿Qué puede pasar con el anuncio de Javier Milei de plebiscitar el aborto legal, seguro y gratuito para intentar derogarlo?

Hay un intento de disciplinamiento social y político a las mujeres como movimiento que generó en Argentina y el continente mayor ampliación de derechos y conquista de políticas públicas. Pero además es el movimiento más esperanzador de los últimos años. Por eso la decisión de elegirnos como su principal adversario. Ellos pueden no garantizar el cumplimiento del aborto legal, pero además pueden conseguir un trofeo disciplinador que sea quitarnos uno de los derechos que más construyó la autonomía de las mujeres sobre nuestros cuerpos. Tiene un claro sentido simbólico intentar derogar esta ley porque tiene un objetivo disciplinador contra el feminismo argentino y del mundo y sería un trofeo de política patriarcal.

¿Qué implica el retroceso en las políticas de memoria, verdad y justicia ante el triunfo de Milei y de (la Vicepresidenta y defensora de represores) Victoria Villarruel que niegan los delitos de lesa humanidad cometidos por la dictadura, banalizan las desapariciones y torturas y califican de “guerra” el terrorismo de Estado?

Tiene consecuencias jurídicas y políticas de gravedad en la continuidad de los juicios de lesa humanidad, en desmantelar la Secretaría de Derechos Humanos que actúa como querellantes en las causas contra los militares que cometieron desapariciones y tortura y que empiecen a diezmar las políticas reparatorias contra las víctimas y darle beneficios a los represores como prisión domiciliario o, incluso, indultos. Negar desde el Estado los delitos más graves que se consideran de lesa humanidad porque son contra la humanidad toda es absolutamente grave. Esto además naturaliza la violencia social en el presente y el futuro inmediato. 

¿Qué estrategias puede tomar el feminismo?

Desde los progresismos, las izquierdas, el campo popular tenemos que hacernos cargo que la construcción política que nos trajo hasta acá está agotada. 

En las redes sociales se habla mucho de la “resistencia” al gobierno de ultra derecha. ¿Qué pensas de esta idea?

Yo no creo tanto en la idea de resistir para volver mejores, sino que desde los feminismos tenemos que proteger la vida e inventar lo nuevo. Los feminismos tenemos mucho que aportar en relación a una política que se hace desde lo próximo y desde lo cercano. El feminismo es una forma de ver el mundo mucho más humana, mucho más empática, mucho más solidaria. La política también tiene que aprender de los feminismos. Sin embargo, desde el propio campo popular, hubo un intento de esconder al feminismo e incluso responsabilizarlo del enojo o del distanciamiento de cierta parte de la sociedad con proyectos progresistas. Los feminismos tenemos muchas herramientas para construir lo que se viene hacía adelante. 

¿Cuál es la mayor urgencia en este contexto?

Hay que proteger la vida e implementar políticas de cuidado. Hay que defendernos entre nosotras, tener claridad e inteligencia colectiva para saber qué peleas hay que dar y agudizar la inventiva sobre las formas en las que hay que dar las luchas. También hay que reforzar la construcción de redes por abajo, generar mayores niveles de comunidad para poder pasar el tiempo oscuro que tenemos por delante.

¿Cuáles son las contracaras del neoliberalismo hoy?

La reciprocidad, la colaboración y el entendimiento que somos cuerpos y tenemos vulnerabilidad que, lejos de ser un defecto o un disvalor, implica reconocer la necesidad del otro y de la otra para poder llevar adelante nuestros proyectos de vida. La política feminista tiene mucho que aportar para la creación de lo nuevo y que los programas de gobierno estén más conectados con la vida de las personas y con sus deseos.

Ciudades sin miedo: http://ciudadessinmiedo.ciudadfutura.com.ar/caren_tepp_apertura_csm/